La primera entrada. El manual del blogero supremo dice (creo) que hay que presentarse. Soy un poco de todo: esposa (suena mucho mejor que 'mujer'), activa, pasional y a veces con un poco de mala leche; madre, rozando la risión cuando juego con mis dos joyas, Audicito McQueen, apasionado por los coches desde hace tres años y medio, algo borrico, animal de costumbres y un poquito ladrón, y El Señor Keke, que en sus casi dos años de vida ha decidido pintar mi vida de colores, sonreir en cuanto me ve y, a veces, solo a veces, marcharse 'hasta con un gitano', pero sólo si el gitano tiene pan.
Cinco horas al día, durante cinco días a la semana, soy profesora de la lengua de Sir William Shakespeare, arte que practico con pasión, un poquito de cara dura y mucha vocación, porque no en vano vengo de la más pura tradición de los 'profes' de antaño, he corrido mucho y tuve buenos maestros.
Desde hace mucho: escritora. Pero no de esos que dicen-que-escriben porque de vez en cuando le dan al word de su ordenador; soy de esas que se sienta a diario, durante dos horas mínimo, a 'discutir' con sus personajes, que sueña con ellos (cuando duermo, que es bien poco), que se siente libre llenando hojas muertas de palabras ligadas y que, en su ingenuidad y/o su estupidez, pretende llegar a algún sitio en el mundo del 'romance fiction'. Por supuesto, siempre en inglés... ¿siempre? Naaaa...
También observo, luego existo. Es cierto que la vida te da sorpresas, como a Pedro Navaja, a Mala Sombra y a Mac the Knife, y de esas yo tengo todas las semanas. Esta ha sido completita, de viernes a viernes.
Viernes 5, 16:15 aprox. The teacher in me se encuentra en su más deliciosa salsa, inmersa en un seminario de FCE que ella misma organizó y que cuenta con 11 alumnos. Antecedents: a mi genial jefa, a quien a partir de ahora llamaremos 'Micro-mega-super-maniyer- de la muerte' le entra la paranoia de 'Oh, no lo controlo, no lo controlo' y me hace pasar el peor inicio de curso de mi vida, que aguanto con paciencia y aplomo, pero que jode, vaya (la falta de confianza, digo). Aprieto los dientes y sigo adelante, y como ella trabaja en el otro extremo de la Ciudad sin Nombre, pues hago como que ojos que no ven, corazón que no siente.
La primera EN LA FRENTE.
A lo que iba: viernes 5, 16:15 aprox.'Micro-mega-super-maniyer-de la muerte' se aparece en clase de 'bicos yes', haciendo resonar sus tacones de taitantos euros y enredando su dedo en el peinado de peluqueria de cincuenta y pico euros de la semana como hace siempre que se que está nerviosa y se siente insegura de lo que va a hacer.
Lady Sandman suspira.
Da igual: the show must go on. Y este promete.
A pesar de haber en la puerta un cartel enorme prohibiendo el paso a toda persona ajena a la obra, porque hay un exam in progress y se ruega please do NOT disturb, aquí llega. Mi cara se curva en una sonrisa de 'you´re welcome' y sigo a lo mío, como si no estuviera. Mis chicos soportan la presión, aunque les ahoga un poco ver que me supervisan sin motivo alguno. So cute!
Lady Sandman corrige el use of English. One-B, two-C...
Sin moversele ni un pelo, no hay nada que esconder.
Ella supervisa. Se sube las gafas de D&G con su dedito indicador rodeado por una sortija que quita el hipo. Cruza las piernas. Asiente. Por centésima vez se enreda el pelo (¿nadie va a decirle que esas extensiones se pueden estropear?). Mis chicos flipan...
¿Quien esta haciendo el examen, vamos a ver?
Llega el climax, justo antes de que acabe la clase. 'May I have a couple of words with your students?' Vaya, pienso, al menos es politicamente correcta. Tú misma.
Le cedo el estrado y me voy al toilet (que también soy humana). Pego el oido y ahora soy yo la que alucina pepinillos, como diría un guapísimo amigo mío. ¡Les está echando la bronca! ''Oh, Blessed Lady Di who are in Heaven', rezo, 'que no la maten...' ¿a quien se le ocurre la peregrina idea de interrumpir una clase (error 1), de corregir por encima del profesor (error 2) y, como remate de los tomates, 'preach someone else´s students' cuando estás cobrandoles $$$ eurazos por dos horas, más libro, más material, más autopista de peaje si me apuras?
Lady Sandman cierra su boca. Dejemos que ella misma se convenza.
Pasa la semana. Con penas y glorias, entre pañales, cenas improvisadas, biberones y un capítulo completo más que añadir a mi libro.
LLEGA EL VIERNES. Seminario again.
Lady Sandman se presenta más que on time en el centro, como siempre; porque me encanta esa clase y porque yo lo valgo me tomo un café sin saber lo que me espera pero, honestamente, imaginandolo.
Mis alumnos desean equilibrar la balanza. Por fin.
'Si estamos en esta clase es por tí, no por nuestros padres ni porque vista mucho tener el First.' Esa frase me hace sonreir, mucho, loud and clear, vuelvo a pensar que la vida es justa, que todo el mundo tiene lo que se merece.
Lady Sandman 1/ Micro-mega-maniyer-de la muerte 0.
TO BE CONTINUED? Sinceramente...
Espero que no.